Nº Registro Sanitario C-15-001589
Consecuencia de la edad en los pies

Consecuencia de la edad en los pies

Deterioro del pie en las personas mayores

Pérdida de elasticidad, de tejido adiposo plantar, piel reseca...

Las personas mayores sufren un deterioro general de todo su organismo y el pie no es ajeno a esta realidad.

Entre las consecuencias más manifiestas se encuentra la pérdida de tejido adiposo plantar. La grasa de esta zona se comporta como un cojín amortiguador y, la pérdida de espesor provoca que la incidencia sobre el hueso sea mayor. Debido a ello, las personas sufren más el contacto contra el suelo, pudiendo ser en ocasiones doloroso o incómodo.

Además, con la edad también se aprecia una disminución de la elasticidad en la piel. Por este motivo, las personas mayores presentan más probabilidades de padecer durezas y callosidades. Además, con el paso de los años la piel tiende a resecarse más, debido al natural y progresivo deterioro neurovascular. Por eso es tan importante una buena hidratación por medio de la toma de líquidos y usar diariamente una crema idónea.

Finalmente, en la tercera edad es muy habitual el paulatino aumento de la lámina ungueal, lo cual causa problemas para que la persona mayor pueda cortarse correctamente las uñas.

Pérdida de elasticidad, de tejido adiposo plantar, piel reseca...
Consejos para los pies de los mayores

Consejos para los pies de los mayores

Igual que en otras etapas de la vida, siempre se pueden seguir unos sencillos consejos para que nuestros pies gocen de buena salud:

  • Aplicar crema hidratante a los pies diariamente y, si es posible, después de lavarlos en agua tibia.
  • Si tenemos algún problema de movilidad o de visión, debemos pedirle a otra persona que nos revise los pies una vez a la semana para ver su estado general.
  • No realizar autotratamientos ni automedicarse en caso de que aparezcan durezas, heridas o dolor. No emplear nunca callicidas.
  • Es conveniente que un profesional nos adapte un acolchamiento en la planta cuando haya gran pérdida de tejido adiposo.
  • Usar calzado amplio, que no apriete ni roce en ningún punto.
  • Una persona mayor con problemas en la vista no debe cortarse las uñas por sí misma. Ante esta situación, se recomienda que lo haga un familiar o, mucho más preferible, un podólogo cualificado, en visitas periódicas. Las uñas no tienen que cortarse en demasía, puesto que pueden llegar a presentarse problemas de infección en la uña o incluso que esta se encarne.